viernes, 4 de diciembre de 2015

Libro vs. Película: Los Juegos del Hambre


¡Hola a todos!

Bienvenidos a este versus que va a estar centrado en la saga de Los Juegos del Hambre, que es a la vez una trilogía escrita por Suzanne Collins y una serie de cuatro películas dirigidas por Gary Ross y por Francis Lawrence.










La saga de Los Juegos del Hambre se ha convertido en una de las mejores historias ambientadas en un mundo distópico, dirigida a un público que es principalmente adolescente, aunque los adultos también podemos disfrutar de ella. La historia puede resumirse más o menos así: Un pasado de guerras ha abocado a los doce distritos de Panem a la tiranía del Capitolio. Sumidos en la pobreza y en la miseria, los habitantes de Panem tienen prohibido atravesar los límites de su distrito. Pero Katniss Everdeen, una chica del Distrito 12, se arriesga todos los días a cruzar la valla que separa su distrito del bosque para ir a buscar comida con la que alimentar a su familia. Sin embargo, nada de lo que haga puede prepararla para lo que le espera. Todos los años, el Capitolio organiza los llamados Juegos del Hambre, un espectáculo televisado que consiste en que dos jóvenes de cada distrito, elegidos por sorteo, tendrán que enfrentarse en un entorno hostil y matarse entre ellos hasta que sólo uno quede con vida. Se trata de un modo de humillar a la población y mantenerla subyugada al mandato del Capitolio, cortando así cualquier foco de insurrección. Cuando Katniss descubre que su hermana Prim ha salido elegida para participar en los Juegos de ese año, se ofrece voluntaria como tributo. Lo que no sospecha es que ese gesto tan noble desencadenará una serie de acontecimientos que llevarán a Panem a una nueva guerra por la libertad.

Hecho este resumen, pasemos a hacer la comparación entre ambas versiones de la historia, advirtiendo de antemano que voy a hacer todos los SPOILERS del mundo, ya que voy a hablar de los tres libros y de las cuatro películas en conjunto.

Dicho esto, empecemos:


Saga literaria

Lo bueno
  • Estilo. El estilo de escribir de Suzanne Collins me ha parecido sorprendente al principio, sobre todo porque era la primera vez que leía un libro escrito completamente en tiempo presente. Acostumbrada como estoy al tiempo pasado y a la tercera persona, para mí fue un poco chocante leer una historia en la que Katniss habla de los hechos que le están ocurriendo justo en ese momento. Esto tiene la virtud de conseguir que avancemos junto a ella en sus aventuras, que las vivamos al lado de la protagonista. No se trata de meros recuerdos, sino de vivencias que nosotros vamos a experimentar con Katniss y sus compañeros. Aunque curioso, me ha parecido un punto positivo.

  • Personajes. Una gran parte del plantel de las novelas cuenta con unas personalidades bastante bien definidas. Al ser una historia contada en primera persona, lo lógico es que conozcamos con mayor profundidad a Katniss. Pero esto no quiere decir que los otros personajes no tengan personalidad y, de hecho, las podemos ver a través de los ojos de Katniss: La dulzura y entrega de su hermana Prim, la fuerza y el valor de Gale, la pureza de sentimientos de Peeta, el cinismo amargo de Haymitch, la vergüenza disfrazada de trivialidad de Finnick, o la calculadora y fría maldad del presidente Snow. Hasta los personajes más pequeños tienen algún gesto que les diferencia de los demás. Aunque existen algunos fallos en la creación de los caracteres de los personajes (que mencionaré en lo malo de la novela), por lo general me han gustado mucho.

  •  Contexto. Me ha parecido muy acertado que la autora haya decidido ubicar la historia en un futuro en el que se pueden ver muchísimos avances tecnológicos y que, a pesar de ello, no parece estar demasiado lejos de nuestro presente. Se hacen ciertas menciones al pasado, como cuando Katniss nos ayuda a ubicar el Distrito 12 en la zona de los Apalaches de Estados Unidos o las constantes referencias al Imperio Romano (la sociedad del Capitolio es clavada a la decadente clase patricia romana), mezcladas con los impresionantes avances que la ciencia y la tecnología han traído. El Distrito 12 está perfectamente descrito como lugar de pobreza y miseria, y es el que muestra más detallismo porque es donde vive la protagonista. También me han gustado las descripciones de los campos de batalla donde se llevan a cabo los Juegos del Hambre, detallados con tal realismo que casi parece que estemos dentro del libro, junto a Katniss, recorriendo las sendas por donde ella va y escondiéndose en los rincones ocultos que ha encontrado gracias a su pericia.

  • Historia. Aunque el argumento de Los Juegos del Hambre está muy bien llevado y adaptado a la trilogía, hay que aclarar que no es original, y ya se le ha achacado muchas veces ese aspecto a su autora. Collins siempre ha asegurado que se había inspirado en la mitología clásica para escribir su trilogía, concretamente en el mito de Teseo. Si recordamos, el héroe ateniense Teseo se había ofrecido a subir en el barco donde viajaban catorce jóvenes (siete muchachos y siete doncellas) que iban a servir de alimento al Minotauro, un monstruo atrapado en el interior de un laberinto situado en la isla de Creta. Al igual que Teseo, Katniss también se ofrece voluntaria como tributo y, como el héroe, consigue salir viva de los juegos. Pero a Collins también se la ha acusado de cierto plagio en su historia, pues el argumento también es muy similar al de Battle Royale, una novela escrita en 1999 por el japonés Koushun Takami, y que trata básicamente de lo mismo: Un grupo de adolescentes atrapados en un campo de batalla en el que tienen que matarse los unos a los otros hasta que sólo quede un superviviente. ¿Plagio o simple coincidencia? Eso lo dejo a vuestro criterio.

  • Realismo. Aunque se trata de una saga para adolescentes, me ha parecido muy bien que se hayan incluido ciertos elementos gore en la historia. ¿Por qué? Pues porque es lógico que, en unos Juegos donde hay armas y gente sedienta de sangre, se vean cortes, mutilaciones y las tripas saliéndose del cuerpo, lo que le da un toque de realismo a la historia. Cierto que a veces Collins no entra en detalles escabrosos y además resuelve las situaciones más violentas con una prosa muy bien elaborada (recordad, por ejemplo, la amputación de la pierna de Peeta). Lo que podría considerarse más negativo es que el realismo se convierte en crudeza a medida que va avanzando la historia, y cuando llegamos a Sinsajo nos encontramos con la violencia más descarnada (las muertes de Finnick y Prim, por ejemplo), que la autora no se recata en retratar con escalofriante realismo.



Lo malo

  • Maniqueísmo. Si hay algo que me fastidia en una historia es que los personajes sean muy buenos o muy malos. Cierto que Katniss no se puede definir como un personaje malo pero, aunque su afiliación es “buena”, mata a varias personas y es capaz de cometer homicidio (en el Capitolio, cuando va de incógnito, Katniss mata a sangre fría a una mujer que la ha reconocido y está a punto de delatarla). Pero lo que más me enerva es que la autora, para dejar claro que Katniss y sus amigos son los buenos, nunca les somete a la terrible prueba de tener que matar a una persona de buen corazón. Me explico: En los campos de batalla durante los Juegos, tanto Katniss como Peeta siempre tienen que luchar contra auténticos hijos de puta que sólo quieren matarlos. Pero, ¿qué habría pasado si Katniss hubiera tenido que elegir entre matar a Peeta o a Rue, por ejemplo, porque de ello dependía la vida de la otra persona? ¿Y si hubiera matado a Finnick o a Johanna porque no confiaba en ellos y luego descubriera que había asesinado a dos personas inocentes?

  • Romanticismo. Al parecer, la norma que rige cualquier novela destinada al público adolescente es que, sea cual sea el tema del que trate, tiene que tener un romance tan imposible y desgarrador como azucarado e innecesario. Los Juegos del Hambre no ha sido la excepción, pues ahí tenemos al trío de rigor: Katniss y sus dos príncipes azules, Gale y Peeta. Por alguna extraña razón que no alcanzo a comprender, Katniss es atrayente para el sexo masculino. Y digo que no lo entiendo porque ella no tiene nada de agradable: es seria, hosca, la dulzura no es su mejor virtud, es bastante borde, insensible al dolor psicológico ajeno (recordad cómo desprecia a su madre por haber padecido una depresión y a Peeta después de que éste haya sido torturado por el Capitolio y le hayan metido a conciencia la orden de matarla), y desprecia las relaciones amorosas como algo que no va con ella. Sin embargo, se permite ciertas licencias románticas en los momentos más inesperados, como darse cuenta de lo mucho que le late el corazón por pensar en determinado chico mientras está apuntando con su flecha a un tributo para aniquilarlo, o el hecho de besar a sus dos pretendientes cada vez que ellos reconocen sentirse solos o desamparados. Además, su manera de resolver el triángulo amoroso es tan fría y desapasionada como ella, pues si escoge a Peeta no es porque le ame, sino porque le “necesita para sobrevivir”. O sea, que el fuerte e independiente Sinsajo necesita tener al lado a un hombre para sobrevivir porque, si no, se la ve muy sola y vacía. ¡Anda ya!

  • Frivolidad. Este apartado va un poco en consonancia con el anterior. Y no, no me entendáis mal. No tiene nada que ver con la escalofriante frivolidad que muestran los habitantes del Capitolio al observar todos los años, como si de un programa de televisión más se tratara, cómo varios adolescentes se matan entre ellos de la peor de las maneras. Se trata de la frivolidad de la propia Katniss (y, por ende, de la propia autora) en algunos momentos de la historia. Para empezar, se le da mucho pábulo a todo el rollo del maquillaje y los estilistas; con el cuento de que los Tributos tienen que resultarles atractivos a los telespectadores, se invierten párrafos y párrafos en el maquillaje, manicura y depilación de Katniss. Por no hablar de las páginas que se les dedican a los vestidos que Cinna prepara para ella. Esto hace que, por ejemplo, veamos a la dura Katniss dar vueltas y reír como una tonta mientras enseña un vestido de fuego, o lanzar amplias sonrisas a las gentes del Capitolio mientras va en el carromato con Peeta durante el primer desfile de los Tributos. Son detalles que me parecen poco apropiados y que banalizan al personaje protagonista. Hubiera preferido que su actitud fuese otra.

  • El final. A ver, el final de Los Juegos del Hambre no es malo. Repito: NO ES MALO. Pero sí que es muy anticlimático y desesperanzador. La muerte de Prim es lo más terrible que se le ha podido ocurrir a la autora para terminar de una vez con la guerra porque es la muerte de la esperanza. Y es que, si recordáis, Prim es el motivo por el que empezó todo. Si Prim no hubiese salido elegida en el sorteo de la Cosecha, Katniss nunca se habría ofrecido voluntaria para ir a los Juegos y nunca se habría convertido en el Sinsajo, el símbolo de la rebelión de los Distritos contra el Capitolio. Todo lo que Katniss ha hecho a lo largo de la historia ha sido por su hermanita Prim, porque lo único que quería era que viviera en paz en un mundo donde no corriera el peligro de ser asesinada para que otros se divirtieran. Pero entonces, a Collins se le ocurrió que no estaba mostrando del todo lo dura y sangrienta que es una guerra, y decidió que Prim debía morir calcinada justo delante de su hermana mayor, para acabar de traumatizarla. Lo que ha conseguido con eso ha sido no sólo destrozar a Katniss por completo, sino también a los lectores. La muerte de Prim carece completamente de sentido y aniquila todo atisbo de esperanza, pues nos da a entender que nada de lo que Katniss ha hecho ha servido para nada, ya que Prim iba a morir igual.



Saga cinematográfica

Lo bueno

  • Adaptación del libro. Llevar un libro a la gran pantalla nunca es tarea fácil, porque se corre el riesgo de causar desagrado en los fans que esperaban mucho de una adaptación de una historia que ya se han imaginado mil veces en su cabeza, con sus características propias y sus particularidades. Pero considero que la saga de Los Juegos del Hambre ha sido muy bien adaptada en su versión cinematográfica. Se mezclan muy bien los entornos de pobreza y miseria (Distritos 11 y 12, por ejemplo) con el lujo desmedido y estrambótico del Capitolio. También me parece positivo el que hayan eliminado personajes que no son demasiado importantes en la saga literaria (es el caso de Madge, la hija del alcalde del Distrito 12, que también es la que le da el broche del sinsajo a Katniss) o los hayan sustituido por personajes que ya conocíamos (en el Distrito 13, quien va a hablar con el atormentado Peeta es Delly en la versión literaria, pero en la película lo hace Prim). Lo bueno es que esa adaptación va mejorando a medida que avanzamos en las películas, haciendo que el espectador visualice muy bien el mundo de Panem, ese que tantas veces se ha imaginado al leer las descripciones de Suzanne Collins.

  • Vestuario. La labor de vestuario no era fácil en esta ocasión, ya que había que mezclar varios estilos que podían no encajar y convertirse en un auténtico desastre en pantalla. Hay tres aspectos básicos que reflejar en el vestuario de las gentes de Panem: Las ropas sosas y tristes de los habitantes de cada Distrito (casi uniformes de campo de concentración), la moda exagerada y colorista del Capitolio (con esos trajes imposibles y esas plataformas que desafían la gravedad) y los uniformes de los Tributos en la arena. Quitando la primera película, en la que flojea un poco el tema de vestuario de los Tributos, las demás se centran mucho en la importancia de los trajes que van a vestir los personajes. Destacaría como más impactante el momento en el que Katniss aparece en el programa de Caesar Flickerman con un despampanante vestido de novia y, al empezar a girar sobre sí misma, el vestido se consume y cambia de forma, volviéndose de color negruzco y desarrollando las alas de un Sinsajo, símbolo que representa a Katniss y, por ende, a la rebelión de los Distritos. Es una escena que a mí me impactó mucho.

  • Maquillaje. En una sociedad que da tanta importancia a la apariencia física como el Capitolio, resulta obvio que el maquillaje tenía que ser llamativo y sorprendente. Este aspecto se ha conseguido muy bien en la película y, de hecho, ha recibido varios premios por ello. Antes de que salieran a la luz las películas, cuando todavía se hablaba del proyecto cinematográfico, busqué algunas imágenes hechas por fans de la saga literaria y me sorprendió mucho que no hubiera prácticamente ninguna imagen que reflejara a los habitantes del Capitolio (sólo una de Effie, creo recordar, y no se le ve más que la cabeza con un gran pelucón rosa). Por eso, creo que la labor de peluquería y maquillaje de la película ha sido titánica y muy reveladora, ya que ha creado una imagen visual muy exacta de esa exageración estilística que tanto gusta a los frívolos habitantes del Capitolio.

  • Actores. Muy, muy buenos. La saga de Los Juegos del Hambre cuenta con un reparto que ya se puede considerar casi de lujo. Los actores más jóvenes como Jennifer Lawrence, Liam Hemsworth y Josh Hutcherson trabajan junto a auténticas leyendas como Donald Sutherland, Julianne Moore o el tristemente fallecido Phillip Seymour Hoffman, y el resultado ha sido excelente en todos los sentidos. Me ha sorprendido gratamente el desarrollo de Jennifer Lawrence, que va mejorando de película en película, de tal modo que es como si vieras evolucionar a la propia Katniss ante tus ojos. Me ha parecido también muy positivo el que en su día hayan escogido un reparto de actores que no estuviera en modo alguno relacionado con la saga Crepúsculo, que estaba muy de moda cuando se empezó a hablar de Los Juegos del Hambre; en este caso, se optó por ofrecer un reparto con caras nuevas, de tal modo que si teníamos que recordar a los actores de las películas, lo haríamos sabiendo que pertenecían a Los Juegos del Hambre, no a Crepúsculo.



Lo malo

  • Dirección de la primera parte. Una de las cosas que casi me hizo recular a la hora de seguir viendo Los Juegos del Hambre fue la dirección de la primera película de la saga. El trabajo de Gary Ross parece el de un principiante, sobre todo por esos movimientos de cámara espasmódicos que marean al espectador durante buena parte de la estadía de Katniss en la arena de los Juegos. Tampoco ofrece escenas realmente memorables o estas pierden por completo ese sentido, como la muerte de Rue o la insinuación del suicidio obligado de Seneca Crane. Por fortuna, ese problema se solventa en las siguientes partes, ya que la dirección queda a cargo de Francis Lawrence, que parece más curtido y nos deja escenas muy bien rodadas y que resultan conmovedoras en más de un aspecto.

  • Banda sonora. No quiero decir que la banda sonora sea mala. De hecho, hay algunas piezas que ya se han convertido en parte imborrable de la saga cinematográfica, como el Himno de Panem, la canción del Árbol del Ahorcado y, en menor medida, la nana de Prim. Pero quitando esas piezas, la banda sonora no es realmente memorable. No tiene canciones o melodías que se te queden en la memoria y las que hay, sencillamente, no te llenan. Para mí, la banda sonora es una parte muy importante en una película, porque le da plena identidad (se llega al punto de que hay películas bastante maluchas que sólo son recordadas por su banda sonora). Me hubiera gustado que se centraran un poco más en la creación de una banda sonora más completa, más redonda, que diera verdadera personalidad a las películas.

  • Poco realismo. Si recordamos, Los Juegos del Hambre es una saga destinada principalmente a un público que ronda los catorce y los dieciocho años. Aunque se trata de una saga en la que la muerte tiene un especial protagonismo, me parece increíble lo simple que se representa en pantalla. Las luchas a muerte en la arena son tan flojas que se obvian los momentos de mayor violencia e incluso se omite la presencia de sangre. Supongo que se ha hecho así pensando en el público al que la saga cinematográfica iba destinada, pero no puedo dejar que sentirme un poco desencantada. Los personajes sufren heridas muy graves y les quedan secuelas de su paso por las arenas de combate, pero eso apenas se ve en las películas. De hecho, me resulta sorprendente lo guapos y enteros que están, por ejemplo, Katniss y Peeta, cuando en los libros se nota que están mucho más afectados (cicatrices, marcas de quemaduras, amputación de partes del cuerpo). En ese sentido, creo que las películas muestran poco realismo.

  • Poca profundización. Así como hay personajes a los que conocemos y con los que empatizamos y conectamos, también hay que ver la otra cara de la moneda, y es que hay algunos personajes (incluso entre los principales) que reciben muy poco tratamiento o no nos dicen nada. Los ejemplos que se me vienen ahora mismo a la memoria son Haymitch y Rue, entre otros. Haymitch es un personaje vital dentro de la novela: Es el mentor de Katniss y Peeta, el único habitante del Distrito 12 hasta el momento que sobrevivió a unos Juegos del Hambre. Es un hombre con graves problemas de alcoholismo, ya que su paso por la arena le ha dejado tan tocado que sólo consigue borrar sus recuerdos cuando se emborracha hasta caer inconsciente; y sin embargo, en la película su personaje parece banal y su enfermedad se toma como un aspecto cómico del personaje. El caso de Rue es distinto, pero el resultado es parecido. En la película apenas sabemos nada de Rue, salvo que a Katniss le cae bien. No sabemos que Katniss busca protegerla porque le recuerda a su hermana, ni nos damos cuenta del grado de compañerismo y cariño que se prodigan la una a la otra en los peores momentos. Por eso, cuando Rue muere en la película, apenas sentimos un poco de emoción, ya que es un personaje que aparece, dice sus frases y muere. Y así se podría decir de otros muchos personajes que pasan sin pena ni gloria por la película.



Bueno, pues hasta aquí por hoy. Espero que os haya gustado este versus y que me dejéis comentarios diciéndome si estáis de acuerdo, si no compartís nada de lo que he puesto, si queréis añadir algún detalle que se me ha escapado... ¡Lo que queráis!

¡Hasta pronto!

3 comentarios:

  1. ¡Hola!
    Estupendo análisis, estoy de acuerdo en casi todo lo que has dicho. A mí también me desconcertó al principio lo de narrar en presente y en primera persona, pero al final hizo me me metiera aún más en la historia, y lo cierto es que en la explosión de distopías que llegó después de "Los Juegos del Hambre", este recurso ha sido imitado hasta la saciedad.
    Lo de "Battle Royale"... a ver, sí, recordar recuerda. Pero no creo que debamos hablar de plagio. Aunque las dos historias tengan una premisa común (adolescentes obligados por el gobierno a luchar a muerte hasta que sólo queda uno), son muy diferentes entre sí. De hecho, aunque disfruté mucho "Battle Royale" cuando la vi, lo cierto es que el trasfondo, los personajes y la premisa de por qué se les obliga a combatir son mucho mejores en "Los Juegos del Hambre". La explicación de "Battle Royale" siempre me pareció una estupidez; la de "Los Juegos del Hambre" es mucho más lógica y coherente.
    Respcto a lo del romanticismo y la frivolidad, estoy de acuerdo contigo en términos generales, pero con dos matices:
    -Aunque es verdad que Katniss elige a Peeta porque lo necesita, no porque lo ama, creo que eres muy dura al acusar a Katniss de debilidad o falta de independencia por ello. No es que necesite a un hombre a su lado, es que necesita a "alguien", a su lado. Ha perdido a todo el mundo. Sus amigos están muertos, su hermana Prim también, su madre se queda en el Distrito 13 y se distancia de ella, y Gale también porque Katniss no le puede perdonar que inventara las bombas incendiarias. ¿Quién le queda? La única persona en el mundo que parece quererla es Peeta; alejarse de él equivaldría a quedarse no soltera, sino más sola que la una. ¿Realmente es censurable que Katniss quiera tener a su lado a alguien que la quiera? Creo que como ser humano es algo que necesita. Es más, me da la sensación de que si Katniss fuera un chico tal vez no harías esta crítica, porque no le haría falta demostrar lo dura e independiente que es, e incluso se valoraría que necesitase compañía y amor (no sé si logro explicarme ^^U ).
    Sobre el final, tienes TODA la razón. Lo dije en mi blog cuando publiqué mi crítica de "Sinsajo" y lo sigo diciendo ahora: matar a Prim fue la mayor pifia de la saga. Como bien dices, con ella muere la esperanza, y lo que es peor, vacía de sentido todos los actos de Katniss. Sí, vale, gracias a ella estalla la revolución, muere Snow y se libera Panem... pero es que Katniss no busacaba nada de eso cuando se presentó voluntaria como tributo. Ella sólo quería salvar a Prim. También se puede decir que si Prim iba a morir de todas maneras, al menos que sea trayendo la libertad a Panem, pero aún así... hubiera visto más lógico que muriera Katniss y se salvara su hermana, la verdad.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. (Sigo, ahora hablando de la película, que me quedaba muy largo el comentario)

      Respecto a la saga cinematográfica, 100% de acuerdo con todo. Yo no habría podido explicarlo mejor. Y también me mareé viendo la primera, por culpa de los malditos movimientos de cámara. ¡Parecía que hubiera un tipo con la camara al hombro corriendo detrás de los personajes! Menos mal que para las siguientes cambiaron el director. Y desde luego, los actores han estado todos impresionantes. ¡No hay ni uno que lo hiciera mal!
      A propósito de esto, a mí me llamó mucho la atención una actriz que hace un pequeño pero impresionante papel en la última película: la niña del abrigo amarillo (que, por cierto, muere en el libro pero sobrevive en la película, sin duda porque la productora pensó que era demasiado duro mostrar a una niñita pequeña acribillada a balazos en una película para adolescentes). Esta niña me trajo de cabeza al salir del cine, porque no entendía como siendo tan pequeña había podido interpretar tan bien a una criatura histérica que intenta despertar a su madre muerta. Luego me enteré de que la actriz, que se llama Elle Graham, no es en realidad tan pequeña (tiene seis años, no los dos o tres que aparenta en la película), lo cual hace que además de rendirme a sus cualidades interpretativas (que lograron llenarme los ojos de lágrimas) me rinda también a los de maquillaje y vestuario, que fueron capaces de "reducirle" la edad a la mitad.

      Eliminar
    2. ¡Gracias por comentar tan pronto! Y, sobre todo, me alegro de haber mencionado todos los puntos; como para estas cosas tú tienes más memoria que yo, si ves que me he saltado alguno no dudes en decírmelo, ^^*

      Lo de "Battle Royale" no estoy insinuando que sea plagio por parte de Collins ni nada de eso. Sólo me limito a hablar de los comentarios que se hicieron en su día, de gente que había leído las dos versiones y había visto que la premisa inicial era muy parecida. Luego ya vemos que el desarrollo de cada obra es muy distinto, que puede gustar más o menos y que cada autor le da su toque personal. Pero el caso era comentar eso: Que en su momento se insinuó que Collins pudo haber tomado el argumento desarrollado por Takami para hacer su propia obra. Yo no lo sé y, la verdad, me da igual, porque las dos obras me gustaron mucho.

      ¿Que soy muy dura con Katniss? Me lo debe de haber pegado ella, jajaja! Bueno, bromas aparte, no creo que tenga mucho que ver con que ella fuera chico o chica; me parece que seguiría pensando lo mismo de un chico que, al elegir entre dos chicas, se une sentimentalmente a la que no ama pero que le ayuda a seguir adelante. Lo aceptaría en plan compañerismo, pero no me parece amor. ¿Que al final acaba queriéndole un poco o tomándole cariño? ¿Quién no le coge cariño a Peeta? Pero en el libro Katniss está realmente frustrada por todo y parece que funda una familia con Peeta un poco por inercia, porque ya no le queda nada y hay que tirar para delante. Yo tampoco sé si me explico, jajaja!

      Si yo hubiera podido cambiar el final, habría hecho que Katniss muriera salvando a su hermana Prim. Me parecería un digno fin para un Sinsajo que ya está cansado de luchar y de ver morir a sus compañeros de armas y amigos. Inicia una rebelión, lucha en una guerra y, finalmente, se sacrifica por el bien de muchos (o el bien que ella quería, la supervivencia de su hermana). Un final al estilo del Señor de los Anillos, como comentaste una vez en tu post sobre "Sinsajo", ^^*

      Eliminar